sábado, 19 de abril de 2014

UN TATUAJE DE CRISTO



Un tatuaje es una alteración al color de la piel, en la cual se elabora una figura o un texto con agujas que inyectan tinta debajo de la epidermis en la piel de una persona. Son conocidos desde épocas antiguas. En Egipto, en épocas bíblicas, eran las mujeres las que se tatuaban nombres de deidades protectores y mágicos. En 1991 se encontró en los Alpes austriacos una momia con 57 tatuajes en su espalda.

Los tatuajes son una moda que avanza con fuerza, ya sean dibujos de mariposas, ángeles, dragones, flores y hasta escudos de equipos de fútbol; algunos los consideran como sexys, a otros los hacen sentir bien y muchos creen que les da belleza a su cuerpo.

Lucky Diamond Rich es considerado el hombre más tatuado del mundo, en el 2006 ingresó al libro Guinness de los records por tener su cuerpo totalmente cubierto de tinta, incluyendo párpados, encías, y hasta dentro de sus orejas.

Marcos Matolo es un pastor que vive en Brasil. Desde niño fue fanático de la banda inglesa “Iron Maiden”, lo que lo llevó a hacerse 172 tatuajes relacionados con este grupo de rock pesado. Marcos cuenta acerca del cambio que Dios ha dado a su vida: “Yo soy una persona totalmente diferente de lo que yo era antes”. Ahora Marcos es fanático de Jesucristo. Una cosa es haberse tatuado el cuerpo antes por desconocimiento a la palabra de Dios y otra seguir haciéndolo después de conocer el evangelio.

Un famoso pastor y teólogo mexicano opina por televisión: “yo conozco muchos cristianos muy consagrados que van a estar con nosotros en el cielo, que traen un arete, que traen un tatuaje y yo no le encuentro ningún problema a eso”. Qué sorprendente, este pastor llama caer en legalismo al querer obedecer los mandamientos bíblicos. Otros pastores son permisivos porque sus propios hijos se han tatuado y sienten que han perdido toda autoridad con su iglesia.

La Biblia enseña en levítico 19 “No haréis sajaduras en vuestro cuerpo por un muerto, ni os haréis tatuajes; yo soy el Señor”. Hacerse cortes en el rostro, brazos y piernas por los muertos y además tatuarse el cuerpo eran prácticas paganas de idolatría egipcia; y seguramente los judíos habían adquirido dichas costumbres.

Hay quienes argumentan al pasaje de levítico que no se debe tomar literalmente o que eso fue un mandato ubicado en el antiguo testamento; a lo que respondemos: ¿Entonces dejamos que cada cual interprete la Biblia a su acomodo? Y ¿Permitiremos entonces que nuestros hijos decidan que parte quieren obedecer de la Biblia y que parte no?

Algunos creen que Apocalipsis 19 da carta abierta a los tatuajes, ya que allí dice que Jesús tendrá en su muslo un nombre escrito: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”. En primer lugar Dicho nombre hace alusión a la soberanía de Cristo sobre todos los gobernadores y en segundo lugar es Jesús quien lo porta, no nosotros.

Finalmente, no es la voluntad de Dios tener un tatuaje de Cristo, es más bien que Cristo habite en nuestras vidas para tener salvación y vida eterna. Las personas no requieren de un tatuaje sino urgen de un sello: “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria” Ef. 1:13-14.

lunes, 7 de abril de 2014

PASTORES CON FANS


Fue en el año 2011 cuando los medios de comunicación reportaron que en Honduras, una joven de 17 años se suicido por estar enamorada supuestamente de un pastor. Un año más tarde se conocía la noticia en Colombia que un supuesto pastor mantenía relaciones sexuales con sus feligreses. Estos dos casos son la muestra de cómo hasta qué punto se puede llegar a idolatrar a un pastor. Ya sea por su influencia, poder, carisma, dinero o cualquier otro motivo, muchos pastores han sido elevados a un trono el cual es adorado por sus fieles.

Un fan es un seguidor, admirador, o un fanático que siente placer por alguien. En el mundo es fácil conseguir fans de cantantes, artistas, futbolistas, pero encontrar… ¿pastores con fans? Pues si los hay. A dichos pastores se les ve autografiando sus libros, cds y camisetas; muchos permiten que les hagan largas filas para tomarse una foto con ellos; otros tienen su propio club de fans y millones de seguidores por facebook. Es lamentable oír a estadios enteros coreando nombres de hombres, como ocurre en shows evangelísticos.  Si para muchos pastores la idolatría llueve en los cantantes cristianos la idolatría no descampa. Lo triste es que según ellos, todo es en el nombre de Jesús.

En toda la Biblia se nos advierte ante el pecado más repetitivo de la humanidad: “Hijitos, guardaos de los ídolos…” 1 Jn. 5:21. Guardaos significa alguien que custodia una guarnición, que hace vigilancia con cadenas. La palabra idolatría proviene del griego “eidolon” que significa imagen y “latris” que significa adoración. De acuerdo al diccionario Vine el término hebreo correspondiente a ídolo denota “vanidad” (Jer. 14:22); y fue precisamente lo expresado por el apóstol Pablo en Hechos 14:15 cuando los nativos de Listra lo llamaron dios: “…nosotros también somos hombres semejantes a vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al Dios vivo…”.

El pastor Paul Washer tiene una frase distintiva: “Si usted tiene alguna motivación en la vida cristiana que no sea Jesucristo, usted es un idólatra”. El salmo 115 brinda las características de los ídolos, pero inicia con la enseñanza de cuidarnos de tal vez la peor forma de idolatría, la de darle la gloria a los seres humanos: “No a nosotros, oh Jehová, no a nosotros, sino a tu nombre da gloria…”. Lamentablemente muchos se exaltan a ellos mismos y por consiguiente a su denominación, desconociendo el consejo bíblico: “Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús” 2 Co. 4:5.

La idolatría muestra sus señales: 1) La foto de tu perfil en facebook es la de tu pastor, cantante favorito o el logo de tu denominación. 2) En tu templo tienen un cuadro gigantesco de los fundadores de dicha denominación. 3) A tus pastores a cada rato lo homenajean y condecoran. 4) Eres un coleccionista de todos los afiches y cds de tus cantantes cristianos favoritos. 5) Toda tu doctrina la basas en los libros de tu pastor y no en la Biblia. 6) Celebras los grammys y reconocimientos que el mundo secular otorga a pastores y cantantes cristianos. 7) Te la pasas más tiempo en tu templo que en tu casa. 8) Has cambiado la lectura de la Biblia y la oración por consumir programas en canales aparentemente cristianos. 9) Sueñas con que tu pastor sea el próximo presidente de tu país. 10) El dinero que deberías aportar como sustento a tu familia lo siembras en tu pastor.

Así que alerta… porque quizás lenta y sigilosamente alguien está ocupando el lugar de Dios, y sin darte cuenta te has convertido en… fans de tu pastor… o peor aún ese alguien eres tú.