Ya sea en sacos de trigo o
en bultos de algodón, William Tyndale enviaba sus traducciones al inglés del
Nuevo Testamento por más de 10 años hacia Inglaterra. Después de ser
estrangulado y quemado en la hoguera Tyndale, fue John Rogers quien tomaría la
posta y seguiría traduciendo el Antiguo Testamento desde el idioma hebreo.
Rogers denunció la autoridad
del papa como cabeza de la iglesia, la doctrina de la substanciación, que la
iglesia no podía perdonar pecados, no reconoció el trono de María; además su
matrimonio como un ex sacerdote católico, fueron razones por las cuales la
reina María de Inglaterra lo condenaría a la hoguera al declararlo hereje,
siendo el uno de los aproximadamente 284 mártires que sufriera dicha pena en
tal reinado.
Sufriendo persecución o
muerte por defender una causa, un mártir es alguien que se dedica en cuerpo y
vida a defender una causa. Fue la
hoguera el sitio final de muchos mártires y el castigo oficial por herejía de Iglesia
Católica Romana. Muchos de ellos tomarían fuerzas seguramente al recordar el
padecimiento de nuestro Señor Jesús: “Angustiado él, y afligido, no abrió su
boca; como cordero fue llevado al matadero…” Is. 53:7.
Después de la ascensión de
Jesucristo, el panorama para los primeros discípulos fueron las prisiones, los
azotes las crucifixiones y el ser arrojado a los leones como espectáculo circense.
Esteban es apedreado. Jacobo el mayor y su acusador quien fue movido a
arrepentimiento al caer a sus pies para pedirle perdón, son decapitados. Felipe
azotado, encarcelado y luego crucificado. Mateo es traspasado con una alabarda.
A Jacobo el menor después de ser apedreado, le abrieron su cráneo con un
garrote. Matías fue apedreado en Jerusalén y luego decapitado. Andrés es puesto
en una cruz en forma de x. Marcos fue arrastrado y despedazado por el pueblo.
Pedro crucificado con la cabeza hacia abajo. Pablo después de orar coloco su
cuello a la espada. Judas (no el Iscariote) fue Crucificado. Bartolomé fue
cruelmente azotado y crucificado. Tomás fue atravesado con una lanza. Lucas
muere colgado en un olivo por sacerdotes. Simón el zelote fue crucificado. Juan
después de ser pasado por una caldera de aceite hirviendo, fue el único que no
tuvo una muerte cruel. El listado continúa hasta nuestros días y se hace
interminable.
5 veces golpea como martillo
en mis oídos la expresión más repetida por Jesús en los evangelios: “El que
halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará”
Mt. 10:39, Mt. 16:25, Mr. 8:35, Lc. 9:24, Lc. 17:33. Todo aquel que busque la
aceptación del mundo, encontrará una calurosa bienvenida en el infierno. Todo
aquel que consagre su vida a Cristo hasta el punto de correr riesgos,
encontrará que el morir es ganancia.
En sus últimos minutos,
gozoso y cantando himnos, John Rogers lentamente era observado por su esposa e
hijos quienes estaban parados junto al camino… camino a la hoguera.
“Gozaos y alegraos, porque
vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los
profetas que fueron antes de vosotros” Mt. 5:12.
AMEN.